Hormona de la confianza

Un estudio llevado a cabo por científicos de la Universidad de Zurich demostró que la capacidad del ser humano de poder confiar en el prójimo en relaciones amorosas, amistades o transacciones de negocios depende de una hormona clave, la 'oxitocina'

Es posible que estemos frente a la hormona que motoriza la humanidad. La que separa a los hombres de los animales, a los pueblos ricos de los pueblos pobres, a los entrepreneurs de la biomasa. No por nada este descubrimiento no se hizo en Argentina sino en Suiza, un país reputado mundialmente por su confianza.
Alain Peyrefitte ya no vive como para ver esta corroboración de sus hipótesis. Francis Fukuyama, a quien algunos han denominado bioconservador, debe estar complacido con el hallazgo.

La 'poción' fue puesta a prueba entre un grupo de voluntarios que cumplieron el rol de 'inversores' y debían transferir créditos a supuestos 'accionistas'.

Los resultados del experimiento indicaron que quienes olían el brebaje, luego invertían cantidades mucho mayores de dinero, y que, de los 29 voluntarios expuestos al químico, el 44 por ciento mostró 'máxima confianza', aún sabiendo que existía la posibilidad de perder toda la fortuna

Nosotros los argentinos, creo que ni tomando bidones enteros de esa pócima podemos sacarnos el dejo de un siglo de avasallamiento de cualquier forma de confianza.