Llevé la guitarra a arreglar, estaba muy hecha pelota (10 años sin siquiera calibrarla se notan). Como es mi única eléctrica, la espera me está matando. Para calmarla pelé la criolla, la cual toco mal.
miércoles, diciembre 16, 2009
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6 comentarios:
m.c.:...aquí me pongo a cantar
al compás de la viguela
que al hombre que lo desvela
una pena extraordinaria
como la (sic) ave solitaria
con el cantar se consuela...
Hugo Fierro,
si de rima se trata
a mi pues mas me atrapa
el poema que al parvulo chetnik
hijo de bosniomusulmana violada por miliciano serbobosnio
mas le indignaria
como snob fifi que es
no es mas ni menos
que el de los baños.
que gracioso marcos: cuando yo tenía tres años, en 1955, mi pobre madre sufrió un tremendo ataque de ciática, y tuvo que ser internda.
siempre nos contaba su sorpresa, cuando un día llamaba a la enfermera para que le pusiera la chata, el timbre sonaba y sonaba, pero no aparecía. entonces lo hizo una señora muy bien vestida que le preguntó si necesitaba algo. mi madre no se atrevia pero al final, toda colorada de verguenza se lo dijo. la mujer, con toda naturalidad le dijo: querida, no se haga problema: c...el pobre, c...el rico, c...el cura y c...el Papa (perdón Roma) y de c. nadie se escapa!!!
Eso es poesía para mis oídos. El baño o su sucedáneo (yuyos, chata), siempre ha sido fuente de inspiración para muchos. No se si llegué a postear algo por el estilo en el blog, pero me causa mucha gracia cuando leo de épocas y lugares remotísimos en que las personas tenían mas o menos las mismas inquietudes.
Quevedo
Carlos, si lo dice Quevedo, yo lo abono.
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