jueves, marzo 27, 2008

martes, marzo 25, 2008

Notichisme

Por lo que me comentaron de buena fuente, los rumores que se decían sobre el Negro oro eran ciertos. Se integra así al selecto club de Nelson Castro, Joaco Morales Solá, Jaim Etcheverry, Gasalla y otros. ¿Qué dirán los oyentes de radio10?

lunes, marzo 24, 2008

El campo tiene la razón y las de ganar

El campo tiene la razón porque la retención sobre la exportación (un tributo de naturaleza aduanera) se percibe como si fuera un ingreso bruto (el ejercicio habitual de toda actividad onersa) con una alicuota conocida sólo en las escalas más altas del impuesto a la ganancia; un 44% sobre lo operado en bruto es confiscatorio.
Lo más interesante es que tiene las de ganar, por la capacidad de presión y de resistencia, si se organiza y adapta a las nuevas dificultades. Con la suficiente determinación el campo puede ejercer una presión similar o mayor aún a la de los camineros.
El gobierno sin quererlo ha agrupado a los distintos entidades del campo, de donde resultó el paro y estas medidas de fuerza de cortar el tráfico de mercaderías. Los camineros ven afectados sus intereses, entonces el gobierno los manda/autoriza a romper los cortes, para los viajantes acaso el aspecto más ruidoso y molesto en este fin de semana super largo.
Suponiendo que Moyano consiga liberar las rutas, con o sin violencia, los sectores productivos del campo tendrán a su disposición la medida del paro, con la cual en un principio la protesta será menos ruidosa, pero a la larga más dolorosa para todos. Medida contra la cual los camioneros, gendarmería ni nadie ninguna fuerza podrá hacer valer. Los camioneros podrán circular libremente, pero sin producción, sus camiones no transportarán cosechas. De esta manera sus intereses también se verán afectados frente al hecho de alguien tan tercero como el quien corta la ruta. Reclamos por despidos y demás deberán dirigirse a los patrones y dueños de los fletes, no a los ganaderos, tamberos y chacareros.
Con un paro extendido por mucho tiempo también se verá afectado el gobierno. Sin producción para exportar no hay retenciones para el tesoro nacional. Es de prever que sea el primero en aflojar la manija y bajar las retenciones con el fin de recaudar al menos algo. Con un superavit que no existe, contradice esta salida, la fácil, el que el gasto público venga en aumento de suerte tal que sin una buena fuente de recaudación, se vea obligado a reducirlo. Así como a los productores no les gusta pagar más impuestos, al estado no le gusta reducir gastos.
Por poco que le guste, los aranceles deberá reducirlos en orden a preservar la paz social. De mantenerse intransigente el campo y cortar toda la producción, el desabastecimiento causará malestar en la ciudad, con mayores precios en los principales productos alimenticios -de demanda naturalmente inelástica- y quizás hambre. La gran interrogante es a quién le echarán la culpa de la escasez los habitantes de la ciudad. ¿A los avaros productores o al avaro gobierno? Viendo que los resultados electorales de las ciudades con amplios sectores medios y altos han favorecido opciones opositoras, puede que allí la mirada acusatoria apunte al gobierno.
¿Qué sucederá en los sectores más pobres y sensibles, como los del conourbano, donde paralelamente el gobierno no tendrá tantos fondos para subsidiar ni importar los alimentos?. Sin ir más lejos, hoy el pan sólo está a $2,40 en el INDEC, mientras en un supermercado como Disco está a $5,40. El gobierno va a intentar desligar su responsabilidad y hacer recaer todo aumento en la concuspiscencia de la oligarquía 4x4. ¿Lo más pobres lo creerán? ¿Y si lo creen, qué pueden hacer? Cada uno juega aquí con una estrategia comunicacional. Con los semipiquetes, los productores obtienen aire y cobertura, dan a conocer su razón, aunque por otra parte también desgastan la imagen al exponerse demasiado. Sin semipiquetes su actuación y razón pasa desapercibida, mas no los nocivos efectos de un paro prolongado.
A la larga los efectos del paro pueden ser funcionales a la causa, sin dejar de perder nocividad para los habitantes de ciudades, para el gobierno, y para el campo mismo.
En el caso de los productores de soja, cuya exportación del cultivo vedette y hasta diosa oleagionsa no ha sido del todo prohibidos para quienes trabajan mayores escalas, (como sí ocurre con la carne, de exportación virtualmente prohibida), no sería económico frenar la producción en momentos de precios internacionales tan favorables. El capital tierra, no obstante, se conservará, y hasta el reposo puede llegar a ser útil. Los tamberos y ganderos soportarán mayores pérdidas, ya no como mero lucro cesante, sino con deterioros directos al capital (las vacas y los tambos). Con todas las dificultades propias de reducir la escala y producción, las comunidades agrícolo-ganaderas no pasarán grandes penurias si pueden adaptar el esquema productivo a una economía de subsistencia orientada a la demanda rural. El desafió radicará en lograr que los productores con mayores extensiones dejen de lado la soja con alta carga fiscal para pasar, básicamente, a plantar papas. En la unión y organización estará la fuerza. Aún para quien sienta tentador dejarse robar por el estado, pues al menos alguna ganancia deja, no debe extrañarle que cuando el robo se hace excesivo y generalizado, la producción se paraliza. Los koljoz de la URSS eran cooperativas agrarias obligadas a vender su producción al estado al precio fijado por éste. Tan antieconómico e injusto era el sistema que a las comunidades campesinas directamente les eran expropiados las cosechas y los animales sin nada en retorno. Pronto se dejó de trabajar la tierra y sobrevino la hambruna con millones de muertos. Hicieran lo que hiceran, estaban condenados. Ante en un escenario actual no tan catastrófico, el campo puede dedicarse a sí mismo -para no caer en hambruna- hasta darle el brazo a torcer al gobierno. No se llegará a tanto: el gobierno va a arrugar frente a la tenacidad de los contribuyentes y productores, pero el campo tiene que saber de su ínsita capacidad de resistencia y de la necesidad de organizarse desde este conflicto hacia nuevos tiempos.

domingo, marzo 23, 2008

Ferchuz

Bajate el disco de este tipo. Acá toca un tema

Eramos tan jóvenes...

De La nacion revista de hoy.
La tripulación de la nave era sorprendentemente joven (entre 18 y 20 años) y presentaba un generalizado cuadro de agotamiento y desnutrición.

Recuerdo que el comandante alemán me pareció muy juvenil y simpático. Tenía tan sólo 26 años

Eso el U-530 comandado por Otto Wermouth. El otro que llegó a Mar del plata, el U-977, era comandado por Heinz Schaeffer de tan sólo 24 años. Se nota que hacia el final de la guerra a Alemania se le estaban agotando los marinos más rápido que los submarinos.
De este lado del continente, en la misma época, vean en esta foto el uniforme de la mayoría de los soldados. Salvo los 2 oficiales al frente, el resto tiene uniformes muy similares al de la Wehrmacht. ¿Heil...Perón?

Alta en el cielo

Que buena versión de la Aurora. La que cantaba en el colegio a las 7:30 era tan aburrida...
Esta la cantaría con ganas, pero terminé hace rato.

War of northern agression

Más temas de historia norteamericana. En un comentario al post del viernes agregué información bibliográfica. Ya que está empezando a hacerse más conocido por la serie de HBO, aquí hay algunas frases de John Adams. Siguiendo con el Rothbard-historiador, hay un extracto de un artículo suyo de 1961. Habla de los antecedentes y causas de la war against the south, o guerra de secesión (la mal llamada guerra civil). Interesante lo que dice de los partidos políticos. A mediados de la década de 1850, los liberales estaban en una encrucijada por no verse cabalmente representados ni en el partido demócrata (esclavista) ni el nuevo republicano (centralista). Si apoyaban a los estados del sur, verdaderos baluartes de los derechos de los estados, suscribían a la vez al extendimiento de la esclavitud y el régimen de persecución de esclavos fugitivos, el cual invadía la soberanía de los estados libres. En cambio si apoyaban a los estados libres, podían terminar dando cabida al avasallamiento de los derechos de los estados del sur en una guerra de agresión para abolir la esclavitud. Los dos caminos conducen a un choque: para no quedar en minoría la esclavitud sólo podía sobrevivir mientras se reprodujera en otros estados nuevos, y como había mucho territorio por colonizar, ardua era la disputa por decidir si cada estado nuevo se incorporaba como esclavista, libre, y si lo hacía sobre la base de un acuerdo nacional previo (como el compromiso de Missouri 1820) o si votaba al respecto. El compromiso de 1850 hizo pareja la repartija de los territorios arrebatados a Mexico. Consiguió demorar 10 años más la guerra que ya venía latente hace tiempo, y ahora más con un norte que se expandía y desarrollaba más rápidamente.

viernes, marzo 21, 2008

Encyclopedia Hollywood

Top 10 películas más inexactas. Mel Gibson tiene 3 premios. Otro es para 10.000 BC. La vi el otro día, también esperando que fuera histórica, y encontré una película de aventura para la gilada, con un guión totalmente anacrónico. Era eso, o Elizabeth y la edad de oro, también galardonada en este ranking.

La rebelión del tocino

Recordarán cuando enlacé a Conceived in liberty, los 4 volúmenes de Murray Rothbard sobre la historia colonial norteamericana. Como supuse que no, puse el "recordarán" seguido del link. Hay novedades. En Mises.org ahora están subiendo los capítulos en formato de audio, muy bueno para los que le da paja leer. Ya hay colgados 17 capítulos, que es decir mucho y poco a la vez. Sólo faltan un par de miles de páginas.
Me escuché el de la rebelión de Bacon, de 10 páginas en 40 minutos. Rothbard deja en claro que una cosa es la revolución con sus móviles, y otra distinta son las derivaciones dentro de la dinámica de la revolución. Consulté dos libros generales de historia norteamericana a ver como abordan la cuestión, y encontré que en la mención casi incidental de Paul Johnson se alude al conflicto de fondo, a algunos hechos del motín y a la finalización, pero no a la dinámica derivada del primer encontronazo. La versión de Isaac Asimov cuenta más detalles personales y pone más al tanto del contexto, pero tampoco repara en las consecuencias no pensadas (decir no queridas haría de todo el acontecimiento un proceso mecánico e involuntario) de esta rebelión. En contraste Rothbard sí logra captar el espíritu libertario del movimiento, pero veamos antes las dos versiones mencionadas.

Así resume Paul Johnson el episodio en su History of the american people (pp. 60-61).
In Virginia it was a constant complaint among settlers pushing into the interior that the authorities never provided them with any protection from hostile Indians. The trouble with Virginia, as indeed with other colonies, is that although its latitude, that is its extent along the coast, was fairly accurately determined by original charters, its extension inland was indefinite. There was an early conflict of interest between the large plantation—owners of the Tidewater, who dominated the assembly and ran the government, and the smaller farmers who penetrated
into the foothills, or piedmont, of the Appalachian ridges, and beyond them. In fact almost from the start two very different societies began to emerge. On the coast, there was a characteristically `Southern’ civilization, slave—owning, tobacco—growing, cultured, elitist, leisured, and there was a much more rugged farming society in the interior—a bifurcation which was eventually to find constitutional expression when West Virginia hived off from the rest during the Civil War and formed a separate state.
Early in 1676, the small farmers up the James River became convinced that the plans of Sir William Berkeley, the royal governor, were inadequate, and that this sprang from the fact that they were underrepresented in the House of Burgesses, dominated by the Tidewater aristocracy. They got a wealthy planter, Nathaniel Bacon, to lead them, both against the Indians and to remonstrate with the governor. Berkeley accused Bacon of treason and had him arrested when he arrived in Jamestown with 500 men on June 6. Then having—as he thought—asserted his authority, he let Bacon go, and the result was an angry confrontation in which Bacon demanded a commission of inquiry into the government’s failure to police the Indians, and authorization to raise an army. The governor then fled, to the eastern shore, and Bacon rampaged for three months in the capital, raising volunteers and plundering the estates of Tidewater grandees. He denounced Berkeley and his `clique’ as `sponges’ who `sucked up the Publik Treasure.’ But on October 26, 1676 he abruptly succumbed to what was called `a severe attack’ of `the bloody flux.’ Without his leadership, the rebellion collapsed. When a party of English redcoats, summoned by the governor three months before, finally arrived in November from England, only eighty slaves and twenty `servants’ still defied the authorities, turning a serious white man’s revolt into a servile one, which was soon suppressed.
Bacon’s Rebellion showed how fragile authority in America was in these early times.


Así lo ve más coloquialmente Isaac Asimov en La formación de América del norte (pp. 65-66).
[la] creciente autocracia e irascibilidad [del gobernador de Virginia Berkeley] en su trato con la gente empezó a socavar su popularidad.
Además, surgieron dificultades económicas. Pese a los esfuerzos de Berkeley, Virginia siguió siendo demasiado dependiente del tabaco. Cuando el crecimiento entusiasta originó un exceso de
producción y cuando el Acta de Navegación y las guerras entre Inglaterra y los Países Bajos pusieron trabas al comercio, se produjo una seria depresión.
Además hubo problemas con los indios. Berkeley trató de proteger a los indios contra el bandolerismo y el asesinato, y favoreció la creación de un sistema defensivo de fuertes contra los ataques indios. Los colonos occidentales no querían saber nada de esto, pues habría sido demasiado caro. Ellos eran partidarios de la exterminación lisa y llana de los indios en todas partes, y acusaron a Berkeley de favorecer a los indios por sus propias inversiones en el comercio de pieles. Entonces apareció en la escena un joven llamado Nathaniel Bacon (un pariente distante de Francis Bacon, el famoso estadista y filósofo inglés).
En 1674, después de una serie de problemas familiares y de algunas malhadadas aventuras financieras, Bacon fue enviado a Virginia por su padre. En Virginia, Bacon tenía un primo que
poseía influencia sobre el gobierno, y la esposa de Bacon estaba emparentada con la esposa del
gobernador. Con tales relaciones, el joven se desenvolvió bien. Fue nombrado para el Consejo del gobernador, aunque sólo tenía veintiocho años; y pudo comprar dos plantaciones de considerable
tamaño.
Cuando uno de los capataces de Bacon fue muerto por los indios, en 1676, Bacon reaccionó violentamente y de pronto se halló a la cabeza de esos hombres de la frontera que deseaban la
guerra contra los indios. (Por entonces estaba arreciando la Guerra del rey Filipo en Nueva Inglaterra, y los sentimientos adversos a los indios eran mayores que lo habitual.) Incapaz de resistir a la lisonja de ser proclamado un líder, Bacon condujo ilegalmente a los granjeros armados contra los indios más cercanos (que eran amistosos, pacíficos y estaban desarmados, inermes) y, el 20 de abril de 1676 mató a unos pocos sin hallar resistencia alguna.
Esto lo convirtió en un héroe e inmediatamente pidió una completa reforma del gobierno y la elección de una Cámara de los Burgesses que adoptase una posición más dura contra los indios.
Berkeley, furioso, se vio obligado a permitir la elección; y Bacon fue uno de los elegidos. Cuando Bacon iba a ocupar su asiento, Berkeley lo hizo arrestar; pero luego se vio obligado a ponerlo en libertad.
Bacon volvió aguas arriba, reunió un séquito armado y marchó sobre Jamestown. Berkeley partió apresuradamente hacia la costa este de la colonia, dejando a Bacon que tomase Jamestown, el 18 de septiembre, y que la incendiase al día siguiente. Durante un momento, Bacon dominó casi toda Virginia y se dispuso a instaurar las reformas que propiciaba.
Lamentablemente para él, tuvo demasiado éxito. Para muchos de los habitantes de Virginia y Maryland empezó a parecerles una especie de Cromwell, y se inició un movimiento de retorno a Berkeley. Cuando el oleaje empezaba a volverse contra él, Bacon murió de disentería el 26 de octubre de 1676.
Para enero de 1677, Berkeley dominaba plenamente la situación de nuevo y tuvo una reacción extrema. Colgó a veintitrés hombres que habían participado en lo que es llamada la Rebelión de Bacon. Y habría colgado a más si los hubiese atrapado. Esto encolerizó a Carlos II, quien señaló que Berkeley se había tomado una venganza más dura por un motín pasajero de escasa importancia que el mismo Carlos por la ejecución de su padre. Berkeley fue llamado de vuelta y murió poco después de llegar a Inglaterra.
La Rebelión de Bacon, aunque fue sofocada logró introducir cambios. La mayoría de las reformas que él había defendido, dirigidas a hacer menos autocrático el gobierno, pronto fueron adoptadas. Y algo más. El incendio de Jamestown fue, en cierto modo el fin de esta ciudad, la primera colonia inglesa permanente en América del Norte. Nunca se recuperó y, en 1692 la capital de Virginia fue trasladada a Williamsburg, que recibió este nombre en homenaje a Guillermo III [William III, en inglés], el rey que había sucedido al depuesto Jacobo II.
Al año siguiente, el 8 de febrero de 1693 se creó allí el Colegio de Guillermo y María, así llamado por el rey y la reina. Fue la segunda institución de enseñanza superior que se creó en las colonias inglesas, sólo veintiún años después del expreso regocijo de Berkeley por la ausencia de escuelas en Virginia.
Como dijo Jefferson
"The tree of liberty must be refreshed from time to time with the blood of patriots and tyrants. It is it's natural manure."

jueves, marzo 20, 2008

Para la prensa reaccionaria latinoamérica no existe

La prensa norteamericana puede llegar a ser más reaccionaria que la reserva federal. Otra que los dichos de Ahmadineyad. Latinoamerica no existe.

Prohibido discriminar a la mano negra

Como dice Rodriguez Braun, todos buscan a ver cómo el estado puede solucionar un problema, pero pocos miran cómo el estado lo originó. Ni hablar de cómo los empeora. Vaya esta introducción para el artículo de Jeff Jacoby, quien recuerda la ley de hipotecas del año 77 y la obligación emergente de prestarle a negros insolventes so color (negro) y so pena de multar y reducir la calificación del banco.
La droga suministrada por Bernanke, en definitiva otro manotazo negro del estado, no ha hecho más que apaciguar al mercado. Veremos qué pasa ante el próximo síndrome de abstinencia. No sería extrañe que volvamos a maldecir por las barbas de Bernanke. Tampoco le queda mucha pichicata.

Frank Shostak en Mises.org dice

In short, Bernanke, by means of his so-called "innovative" policy of fixing the symptoms of the disease, believes he can cure the disease.

What is the source of the disease and why are investment banks so heavily infected by it? The root of the problem is the Fed's very loose interest rate policy and strong monetary pumping from January 2001 to June 2004. The federal funds rate target was lowered from 6.5% to 1%. It is this that has given rise to various malinvestments, which we label here as bubble activities.


Guerra contra el exaccionismo

Entre tanto, una treintena de manifestantes fueron detenidos frente al edificio federal que alberga la Oficina de Recaudación de Impuestos (IRS), como parte de una serie de protestas en diversos puntos de esta capital.

Una de las sedes de protesta fue el IRS, indicaron, porque ahí se reciben los impuestos que financian la guerra.

¡Death to IRS!

miércoles, marzo 19, 2008

Mañana posteo en serio

Paul Gilbert y Bruce Boulliet reunidos tocan viejos temas de Racer X.





y acá tocando la sinfonía 88 de Haydn

Un biempensante

Al ser consultado, un biempensante Jim Cramer aconsejó al televidente e inversionista no vender las acciones que tenía en Bear stearns, que hacerlo sería tonto. En pocas horas las acciones pasaron de 60$ a 2$.

martes, marzo 18, 2008

Por las barbas de Bernanke

¡Dejá de bajar la tasa! Estás apagando el incendio con nafta flaco, justo ahora que está caro el petroleo.

lunes, marzo 17, 2008

Así se hace

Paul Gilbert te toca algunos temas clásicos. Extraído de una videoclínica.

domingo, marzo 16, 2008

Temita...achús

Producto quizás de la convalecencia, hoy al despertar tenía en la cabeza una idea musical. Así que antes de desayunar, de leer el diario, y mientras escuchaba el programa radial de Mariano, ya la estaba volcando a algún soporte para no olvidármela. Hice una pista cortita de midi, como quedó decente, le grabé encima algunas violas (estas sí no son decentes, mucho pifie). Es una idea, o demo. Dejo 2 versiones. La base (2 guitarras) y la base + solo mayormente improvisado (4 guitarras).

Apunten unos Qassam a estas coordenadas

Debo disculparme por el bajo ritmo de posteo. La semana pasada empecé las clases y en este el primer fin de semana me enfermé. Ahora estoy bien, pero no por mucho. No se qué es lo deletéreo, si la noticia o el "periodista" que la comunica. El camarada Miguel nos informa (¡cómo no me avisaron!) sobre el conciábulo a realizarse en Rosario con fines claramente conspirativos. Participarán del mismo masones (Escude), extraterrestres (Flavio Zerpa), sionistas, nazis que ganaron la guerra, Bin laden, Bush II, la derecha religiosa (Palau, Bergoglio y el Rabino Bergman), Patti y directores de empresas extractoras de agua. Supervisa el FMI; el relator será Walter Graziano y el organizador BlogBis (pone la casa).
El "comunismo internacional" no fue invitado a la reunión, allí la protesta del camarada Miguel.

viernes, marzo 14, 2008

jueves, marzo 13, 2008

Al infinito y más allá, Superpijitus

Me apenó mucho la muerte de Guinzburg. A diferencia de toda esa gente que ahora sale en TV, yo nunca lo traté y no lo conocí más de lo que cualquiera podía ver en televisión. Mi primer recuerdo de él es del ciclo humorístico Peor es nada del año 91 y uno de los tantos sketchs que ya con mis 8 años me fascinaban. Guinzburg se ponía una media enrollada dentro del calzón de lycra para personificar a Superpijitus, una sátira de Superhijitus pero con todos los clichés de las historias de superheroes. Cual Superman a la criptonita, Superpijitus era vulnerable a la exposición al jamón crudo. Fontova, con su bigote refinado hacía de Larguirucho. En fin, un recuerdo nomás.