jueves, mayo 28, 2009
Esa es la respuesta
En una parte de The great raid hay un exquisito diálogo entre el oficial norteamericano prisionero de guerra y el encargado japonés del campo. Como Lugo, reproduzco:
-¿Usted luchó en Batán, mayor?
Comandó las operaciones de un batallón de infantería cerca del río Mamala.
-Le puedo decir mi nombre, rango y número de serie.
-Hallamos esto en sus barracones.
Supongo que fueron contrabandeados por la resistencia filipina.
Dicen: "Tengan fe". ("MacArthur volverá".)
-Llevamos tres años viviendo con esos rumores.
-Salvo que, en esta ocasión, son ciertos.
Sus fuerzas reconquistarán a Filipinas en pocas semanas.
- ¿Por qué me lo dice?
- Porque es inminente.
Usted es el oficial al mando.
Si me ayuda a mantener el orden, haré que su estadía aquí sea tolerable.
Pero, por cada prisionero que intente escapar, mataré a otros diez.
¿Usted es casado, mayor?
- No.
- ¿Tiene motivos para seguir viviendo?
-Me gustaría estar vivo para cuando se rindan.
-Entonces, le vendría bien estar sanito.
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2 comentarios:
Pulgar arriba, qué buen intercambio.
bien!
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